¿Quieres consejos para diseñar una sala gamer? Una sala de juegos puede ser un complemento divertido para cualquier hogar. Proporciona un espacio para que los niños se relajen y se diviertan después de una larga jornada escolar. Además, los niños pueden disfrutar de muchas otras actividades, como jugar a videojuegos, ver películas o leer libros.
Consejos para diseñar una sala gamer
A continuación te damos algunos consejos para diseñar una sala gamer para tus hijos.
Personaliza los accesorios
A la hora de diseñar una sala de juegos para tus hijos, es importante asegurarte de que los accesorios se adapten a sus preferencias e intereses individuales. Tanto si les gusta jugar a los videojuegos como leer libros, debes elegir muebles y decoraciones que reflejen su personalidad y estilo. Por ejemplo, si a tu hijo le gusta la serie, puedes pensar en un tapete de Digimon, o puedes optar por un sillón de colores si le gusta descansar. También puedes decorar las paredes con pósters u obras de arte que les gusten a tus hijos.
A la hora de personalizar los accesorios, es importante tener en cuenta la edad y el tamaño de tus hijos. Por ejemplo, si diseñas una sala de juegos para adolescentes, debes elegir los muebles adecuados para tu edad. En cambio, si tienes niños más pequeños, es mejor seleccionar juguetes y accesorios más pequeños que puedan utilizar con seguridad.
Elige la iluminación adecuada
La iluminación es un factor importante a tener en cuenta a la hora de diseñar una sala de juegos para tus hijos. Debes optar por una iluminación menos intensa, ya que puede causar fatiga y cansancio ocular. En su lugar, debes elegir luces suaves que creen una atmósfera confortable en la habitación. Por ejemplo, puedes instalar luces LED suaves alrededor de la zona de juego para crear un ambiente relajante.
Además, debes utilizar luces de trabajo para crear zonas específicas en la sala de juegos. Esto ayudará a tus hijos a concentrarse en sus actividades sin interrupciones ni distracciones. Asegúrate de elegir bombillas de bajo consumo con niveles de luminosidad ajustables. De este modo, la sala de juegos será confortable y ahorrará costes de energía.
Organiza el espacio
Cuando diseñes una sala de juegos para tus hijos, es importante que el espacio esté bien organizado y libre de desorden. Tómate un tiempo para organizar los muebles y los elementos de decoración de forma atractiva. Asegúrate de que haya suficiente espacio de almacenamiento en la habitación para que tus hijos puedan mantener sus consolas de juego y accesorios organizados. También puedes añadir cajas decorativas para guardar tarjetas de juego, mandos a distancia y otros objetos.
Algunas formas de organizar el espacio incluyen la utilización de estanterías para guardar el equipo de juego, los mandos, los controles y demás, la instalación de ganchos en la pared para colgar mochilas y otros artículos, y la adición de una estantería para mantener los libros y las revistas bien guardados cuando no se utilizan. Asegúrate de dejar mucho espacio libre para que tus hijos puedan moverse y jugar libremente.
Proporciona asientos cómodos
Elige sillas ajustables para que puedan encontrar la altura perfecta para jugar. Además, considera la posibilidad de añadir bolsas de frijoles o cojines para el suelo que puedan utilizar cuando jueguen en el suelo.
Además, asegúrate de que haya suficiente espacio entre los distintos muebles, para que tus hijos no se sientan apretados. Así podrán estirarse y relajarse mientras juegan. Por ejemplo, puedes añadir un sofá y unos sacos de judías para crear suficiente espacio para sentarse en la sala de juegos.
Añada opciones de entretenimiento
Una sala de juegos debe proporcionar entretenimiento a tus hijos más allá de los videojuegos. Considera la posibilidad de añadir un televisor, un sistema de sonido y otros aparatos a la zona. Esto les permitirá escuchar música o ver películas mientras no juegan. También puedes optar por dispositivos de streaming como Amazon Fire Stick y Apple TV para que tus hijos tengan acceso a diversas opciones de entretenimiento.
Sin embargo, debes tener en cuenta el contenido al que pueden acceder con estos dispositivos. Lo mejor es utilizar el control parental para garantizar que no puedan acceder a material de juego inapropiado. Por ejemplo, si utilizan dispositivos conectados a Internet, deberías instalar un sistema de filtrado para evitar que accedan a contenidos inapropiados.
Crea un ambiente abierto
Por último, es importante crear un ambiente abierto en la sala de juegos para que tus hijos no se sientan limitados. Asegúrate de que la puerta y las ventanas de la habitación estén abiertas cuando estén jugando, ya que esto les dará una sensación de libertad. También puedes dejar algunos juguetes o libros por ahí para que los exploren durante sus descansos del juego.
Además, hay que crear un ambiente confortable en la sala de juegos. Considera la posibilidad de añadir colores vivos a las paredes, poner música ligera o incluso traer algunas plantas de interior para hacer el espacio más acogedor.
Crear una sala de juegos para tus hijos no tiene por qué ser difícil. Con los consejos adecuados, puedes crear un espacio acogedor.